La tranquilidad de la vereda El Salado, ubicada a solo 25 minutos del casco urbano de La Plata, Huila, se vio truncada la noche de este viernes 25 de julio, tras un brutal ataque armado que cobró la vida de cuatro personas y dejó dos más heridas. El hecho, registrado sobre las 11:00 p.m., sacudió a la comunidad rural que todavía no se repone del impacto de la violencia en el departamento.
Según los primeros reportes de las autoridades, alrededor de ocho hombres fuertemente armados ingresaron al sector movilizándose en una camioneta y dos motocicletas. Sin mediar palabra, abrieron fuego indiscriminadamente contra un grupo de personas que departían en una cancha deportiva local. El pánico se apoderó de los residentes, quienes reportaron la situación a la Policía tras la llegada de una de las víctimas heridas al hospital de La Plata en busca de atención urgente.
En el lugar de la masacre, la Policía y el Ejército recogieron las primeras evidencias e identificaron a las víctimas mortales: Wilson Arley Delgado Úsuga, Kevin Denilson Quiguazú Rosero, Édgar Mauricio Yasno Caldón y Jesús Humberto Andrade Cuéllar. Los heridos, identificados como Héctor Quisacue Ramírez y Luis Ramírez Yasno, permanecen bajo observación médica. La gravedad del ataque evidencia la sevicia utilizada por los responsables.
Las primeras hipótesis apuntan a que los agresores formarían parte de una estructura armada ilegal con presencia en la región; las investigaciones consideran la posible implicación de la columna móvil Dagoberto Ramos, facción disidente de las antiguas FARC que ha venido expandiendo su dominio desde el Cauca hacia el noroccidente del Huila, según alertas previas de la Defensoría del Pueblo.
El Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) confirmó que esta es la masacre número 40 registrada en Colombia durante 2025, un preocupante índice que refleja el incremento de la confrontación entre grupos armados ilegales y la población civil en zonas estratégicas del país.




