El municipio de Francisco Pizarro, enfrenta una grave crisis hídrica que ha dejado a más de 14 mil habitantes sin acceso a agua potable. Esta situación, derivada de los efectos del fenómeno de El Niño, ha generado una emergencia sanitaria y social en la región.
La alcaldesa de Francisco Pizarro, Mireya Ballecilla, ha solicitado con urgencia la intervención de la Gestión del Riesgo, la Gobernación de Nariño y el Gobierno Nacional para mitigar esta crisis y garantizar el suministro de agua a las comunidades afectadas.
La mandataria expresó su preocupación. «La situación que se está registrando es bastante grave. Hemos intentado controlar esta emergencia desde la Administración, pero nuestra capacidad de respuesta frente a la sequía es limitada”.
Jhon James Angulo, gestor social del municipio, manifestó: «las comunidades están muy afectadas porque no se cuenta con agua para consumo humano. La falta de agua potable está empeorando la situación, y las quejas son constantes».
A esta escasez de precipitaciones se le suman los daños causados por el deslizamiento de tierra y la caída de árboles sobre una de las principales fuentes de captación de agua, la cascada que alimenta el sistema hídrico del municipio.
Según un diagnóstico preliminar, la inversión necesaria para resolver la crisis supera los $500 millones de pesos, esto contempla la reconstrucción de la bocatoma dañada por los deslizamientos y la construcción de otra que garantice el agua a corto y largo plazo.
Ante esto, han hecho un llamado al Gobierno Nacional y a las autoridades regionales para que proporcionen el apoyo necesario para superar esta emergencia. Se requiere una respuesta inmediata para garantizar que el agua llegue a los hogares.
