Hace un año, en el marco de la COP16 realizada en Cali, nació oficialmente Makkú, un emprendimiento social y sostenible que decidió darle una segunda oportunidad a materiales que parecían condenados a ser basura. Bolsas plásticas, banners de publicidad, costales o retazos de carpas de camión son transformados en tela plástica para crear bolsos, cartucheras, cosmetiqueras, estuches y otros productos que hoy circulan en el mercado con el valor agregado de cuidar la naturaleza.
“Me alarmó ver las cifras de contaminación por plásticos. Sentí que debía actuar y aportar una solución desde lo que estaba a mi alcance. Así nació Makkú, como una forma de mitigar, aunque sea un poco, el daño que este material causa al medio ambiente”, indicó Tatiana Restrepo, su fundadora.
Economía circular: dar vida a lo que parecía desecho
El proceso es tan innovador como inspirador: cada bolsa plástica es recolectada, clasificada, limpiada y transformada en una tela reutilizable que sirve como materia prima para la manufactura. “De lo que yo hago puedo ayudar a reducir la contaminación plástica, y eso se refleja en nuestro entorno natural, que tanto nos necesita”, asegura Tatiana.
El nombre del emprendimiento también tiene un significado profundo. Makkú significa “manantial de vida” en lengua kankuama, etnia del norte del municipio de Valledupar, un mensaje que refleja la esencia de su proyecto, que es dar vida nueva a lo que se creía perdido.
Volver a la Semana de la Biodiversidad
Luego de dar sus primeros pasos durante la COP16, Makkú regresa a la Feria de Negocios Verdes de la Semana de la Biodiversidad, esta vez con más experiencia, más productos y con el respaldo de una ciudadanía que cada vez quiere consumir de manera más responsable.
“Estar en espacios como el Bulevar del Río durante la Semana de la Biodiversidad es increíble, porque permite que más personas conozcan nuestro emprendimiento. Agradezco a la Cámara de Comercio y a la Alcaldía de Cali por darnos estas oportunidades para crecer”, expresó Tatiana.
Una semana que apuesta por una Cali sostenible
Desde la Administración del alcalde Alejandro Eder se han generado espacios estratégicos como la Semana de la Biodiversidad para sensibilizar a empresarios, organizaciones y ciudadanos sobre la importancia de proteger los recursos naturales. Apostarle a la protección y conservación de la biodiversidad, a través del impulso y apoyo a negocios verdes que promueven un consumo responsable, es un paso fundamental para hacer de Cali una ciudad ambiental y socialmente sostenible. ¡Así recuperamos a Cali!
