El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, volvió a generar controversia este jueves durante un conversatorio con jóvenes en el marco de la celebración del Día del Estudiante, al proponer el cierre de todas las redes sociales en el país. Según Maduro, la medida busca prevenir los «mensajes nocivos» y las posibles afectaciones que estas plataformas pueden causar en niños y jóvenes venezolanos.
Durante su intervención, el mandatario aseguró que las redes sociales son utilizadas para difundir contenido perjudicial que, en su opinión, afecta negativamente el bienestar emocional y psicológico de la juventud. En ese sentido, abogó por un control más estricto de estas plataformas como parte de un esfuerzo para proteger a las nuevas generaciones de los impactos negativos del contenido en línea.
La propuesta de Maduro rápidamente se convirtió en tema de debate en diversos sectores, generando reacciones tanto a favor como en contra. Mientras algunos defienden la idea como una medida para proteger a los más jóvenes, otros la consideran un intento de censura y una violación a la libertad de expresión.
La discusión sobre el control de las redes sociales en Venezuela no es nueva, y esta última propuesta ha reavivado las tensiones sobre el acceso a la información y la autonomía de los ciudadanos en el país. La comunidad internacional también ha manifestado su preocupación ante la posibilidad de nuevas restricciones a la libertad de internet en el país.
