María de los Ángeles Angulo, madre de una menor de 14 años, enfrenta una angustiante situación debido a la demora en el traslado de su hija a un hospital de mayor complejidad en Bogotá. La niña, diagnosticada con enocefalia, ha requerido 19 cirugías desde los cinco años, la más reciente realizada en la clínica Medilacer de Neiva.
Una enfermedad compleja
La menor fue diagnosticada con esta condición a los cinco años y desde entonces ha pasado por diversos procedimientos quirúrgicos. Su madre relata que, en su primera hospitalización, permaneció un mes y cinco días en Neiva, donde le practicaron ocho cirugías. Desde entonces, ha tenido intervenciones en Pitalito y nuevamente en Neiva, sumando un total de 19 procedimientos.
Actualmente, la menor necesita un traslado urgente a Bogotá debido a la ausencia de una válvula en su cabeza, lo que la obliga a mantenerse casi acostada para evitar complicaciones graves. Según los médicos, el procedimiento debe realizarse lo antes posible para prevenir riesgos mayores.
Denuncia contra la Nueva EPS
A pesar de la gravedad del caso, la madre denuncia que la Nueva EPS no ha autorizado el traslado de su hija. Según su testimonio, cuando acudió a las oficinas en busca de respuestas, una funcionaria le informó de manera despectiva que la EPS solo se encarga de autorizar medicamentos y citas médicas, pero no traslados.
Ante esta respuesta, la madre acudió nuevamente a la clínica Medilacer, donde los médicos confirmaron que el traslado es necesario, pero que depende exclusivamente de la autorización de la EPS.
Gestiones con autoridades de salud
Desesperada por la situación, María de los Ángeles ha buscado apoyo en la Secretaría de Salud Municipal y la Superintendencia de Salud. Sin embargo, hasta el momento, la única respuesta que ha recibido es que el caso está en proceso.
La madre clama por una pronta solución y pide a la Nueva EPS que autorice el traslado con la urgencia que el caso requiere. “Solo quiero que mi hija reciba la atención que necesita. Cada día que pasa sin el procedimiento aumenta el riesgo para su vida”, expresó con preocupación.
Un llamado a las autoridades
El caso ha generado indignación y preocupación, pues no es la primera vez que una EPS retrasa autorizaciones médicas fundamentales. La comunidad y los medios de comunicación han elevado la denuncia con la esperanza de que las autoridades aceleren el proceso y garanticen el derecho a la salud de la menor.
Mientras tanto, María de los Ángeles Angulo sigue a la espera de una respuesta concreta, confiando en que su hija reciba la atención médica especializada que necesita para mejorar su calidad de vida.



