Luto en el Cauca, por la muerte de educadora

Rosa Elisa Porras de Collazos, Q.E.P.D.
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En la capital caucana falleció la reconocida educadora, Rosa Elisa Porras de Collazos, sus allegados la recuerdan por su cariño y dedicación a la docencia, quienes lamentaron su partida y se unieron en oración por su descanso eterno.

Según lo dado a conocer por sus allegados: “siempre la recordaremos por tu sonrisa amplia y llena de cariño, a su esposo, José Aníbal, a sus hijos; Marcela, Diego y Adriana, así como a sus seres queridos, nuestras más sentidas condolencias. Dios los llene de valor en estos momentos tan difíciles y que el Señor la reciba entre sus brazos y la tenga en su gloria”.

Así mismo establecieron: “que las mejores y más profundas lecciones de vida te lleguen con esta única realidad. Gracias por reflejar el amor, ese que seguramente te enseño ella y tu círculo… Te quiero mucho, te envío muchos deseos de fortaleza para ti y tu familia”, sostuvo uno de los amigos de una de sus hijas.

Tras conocerse su muerte, varios han sido los mensajes de condolencia recibidos, “lamentamos el sensible fallecimiento de la señora Rosa Elisa, quien laboró como docente por varios años en el colegio Nuestra Señora del Carmen y quien será recordada por su carisma y entrega a la institución. Enviamos nuestras condolencias a sus familiares y allegados”.

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Algunas de las personas que recibieron de ella aseguraron: “apreciada Rosita, usted fue una grandiosa mujer y un verdadero ejemplo para todos nosotros porque nunca se dio por vencida frente a la adversidad y nos dejó una grandiosa enseñanza de vida. Le recordaremos para siempre y le pedimos a Dios por su descanso eterno”.

Esta casa editorial conoció que su velación fue realizada en la carrera 11 con calle 15N del barrio Antonio Nariño y tras realizarse las exequias, fue conducida al Campo Santo donde sus seres queridos le dieron un sentido adiós, contando con una muestra musical para rendirle un homenaje, así mismo, las personas que la acompañaron aseguraron que se unieron en oración por su eterno descanso: “ahora tenemos un angelito en el cielo que nos cuidará eternamente”.


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