Luis Edier Díaz fue hallado muerto en plena vía de Bugalagrande Valle

Álvaro Betancourt, presidente.
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Un suceso violento y de mucha sangre se presentó en la municipalidad vallecaucana de Bugalagrande, un sector en el que la violencia abunda permanentemente, y que se hace protagonista con las balas, la sangre y la muerte al instante, siendo este un hecho de suma preocupación para las autoridades judiciales, quienes deberán implementar estrategias de seguridad y evitar este tipo de noticas sangrientas.

Como Luis Edier Díaz Álzate, de 40 años de edad, fue identificado el hombre asesinado el pasado fin de semana en la curva el Violín, corregimiento de Paila Arriba, jurisdicción del municipio de Bugalagrande. Al momento de la inspección del cuerpo, la víctima, quién recibió varios impactos con arma de fuego se encontraba indocumentada, por lo que fue necesario el cotejo de las huellas dactilares para conocer su plena identidad.

De Díaz Álzate se conoció que era natural del municipio de Sevilla, los móviles y agresores son materia de investigación por parte de las autoridades, quienes tendrán la difícil labor de encontrar a los culpables de este vil asesinato que enluta una vez más, a una familia vallecaucana, la cual llora y sufre por la violenta muerte de este hombre cabeza de hogar.

Se esperan respuestas por parte de la fuerza pública en conjunto con las entidades departamentales de seguridad para que implementen estrategias ante los actos delictivos que se han estado presentando y lo peor, muchos de estos siguen en la impunidad y con familias destrozadas y en luto que claman justicia por la muerte de sus seres queridos.

Los crímenes se han vuelto el pan de cada día en las diferentes municipalidades del Valle, especialmente en sus zonas rurales, fincas y campos, donde la autoridad es algo escasa. Se espera más pie de fuerza en dichos sectores, ese es el llamado que hace la población a las entidades encargadas brindar seguridad.

Ahora se investigará bajo presión de los allegados del fallecido, quienes no estarán tranquilos ni descansarán hasta que la fuerza judicial haga lo suyo. Se espera esclarecimiento del hecho y que esta vez no reine la impunidad, pues casos como este se han visto, en el que los asesinos siguen sueltos.


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