La estrategia del sector político liderado por el exalcalde de Villavicencio, Juan Felipe Harman Ortiz, para debilitar la influencia de Juan Guillermo Zuluaga Cardona ha reavivado el debate. Y no es para menos: de manera meticulosa, Harman ha consolidado una red de apoyo con figuras que hasta hace poco respaldaban a Zuluaga y que fueron fundamentales en el triunfo electoral de Rafaela Cortés Zambrano en las elecciones regionales de 2023.
Tensión
Esta situación tiene tenso el panorama político del Meta, pues Harman Ortiz ha sabido capitalizar el descontento de un sector que considera que Zuluaga Cardona incumplió los compromisos adquiridos durante la campaña. Para muchos de estos actores políticos, la victoria electoral no se tradujo en las expectativas de participación que habían sido prometidas, lo que llevó a una fractura interna que ahora juega en favor del exalcalde de Villavicencio.
El poder de convocatoria de Juan Felipe Harman Ortiz ha sido evidente con la llegada de figuras clave a su equipo. Entre los nuevos aliados se encuentran Hernando Martínez Aguilera, Paula Vega, Mireya González, Ricardo Martínez, Andrea Galvis, Felipe Rodríguez, Daniela Gaitán, Álvaro Martínez, Alicia Guasca y Yeny Montaño, entre otros. Además, se han sumado varios exconcejales de Villavicencio que en su momento respaldaron a Zuluaga Cardona, entre ellos Walter Cook, Marco Aurelio López, Pedro Nel Macías y Jhon González.
Alianzas
Las adhesiones no se detienen ahí. En los próximos días, se espera la llegada de Fernando Rivera y Andrés Felipe García, dos figuras que en su momento fueron cercanas al exgobernador del Meta. Esta reconfiguración política sugiere un movimiento estratégico que podría alterar significativamente la correlación de fuerzas en la región.
Análisis
Para algunos observadores, la desbandada de líderes y exfuncionarios refleja una fractura que podría debilitar las aspiraciones del exgobernador del Meta. Sin embargo, los seguidores más cercanos a Zuluaga minimizan la situación y afirman que estos movimientos no afectan su liderazgo ni su camino hacia la Casa de Nariño. Zuluaga Cardona sigue apostando por su imagen de liderazgo consolidado y mantiene su trabajo en busca de una proyección nacional. No obstante, la pérdida de aliados estratégicos y la creciente influencia de Harman Ortiz en la región podrían convertirse en un obstáculo difícil de sortear en su camino político.
La política regional en el Meta atraviesa un momento de cambios y reconfiguraciones que podrían definir el futuro de las próximas elecciones. Mientras tanto, la estrategia de Harman Ortiz sigue avanzando, y el desenlace de esta contienda determinará qué tan profundo es el impacto de esta fractura en el grupo de Zuluaga Cardona.




