Los detalles macabros del asesinato de la psicóloga Adriana Pinzón

En los testimonios recogidos durante la audiencia donde confesó el crimen, Jonathan Torres relató cómo fueron los últimos minutos de vida de quien era su cuñada.
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En los últimos meses un caso que estremeció a Colombia fue el asesinato de la psicóloga Adriana Pinzón, cuyo cuerpo fue encontrado en una vereda del municipio de Zipaquirá con signos de violencia previos a su deceso.  Así lo confirmaron en su momento gracias a los análisis dactiloscópicos realizados por Medicina Legal.

Fiscales del caso y personal del CTI de la Fiscalía conocieron información sobre la ubicación del cuerpo de la víctima, se trasladaron a una vía en la vereda Río Frío, en Zipaquirá, y encontraron en una zanja una bolsa negra en la que estaba el cuerpo que guardaría relación con la psicóloga.

El pasado jueves 11 de agosto, Jonathan Torres, cuñado de la mujer y principal sospechoso del crimen aceptó los cargos por el asesinato.

En los testimonios recogidos durante la audiencia donde confesó el crimen, relató cómo fueron los últimos minutos de vida de quien era su cuñada, Según indicó, el homicidio «fue algo pasional, algo emocional«.

Confesó que la psicóloga lo dejó entrar a su recinto, donde le confesó que estaba sosteniendo una relación con otra mujer. Jonathan Torres es el esposo de la hermana de Adriana, Sandra Pinzón.

«Entramos en un choque (…) me dio mal genio, nunca me había pasado esto, entramos en discusión y sucedieron los actos, sucedió el homicidio, hice el homicidio», confesó el hombre.

La confesión que mayor indignación causó fue cuando Torres indicó cómo asesinó a la psicóloga. Remarca que en medio de la discusión donde la mujer estaba defendiendo a su hermana, el enloqueció y la apuñaló por lo menos 11 veces y luego dejó que se asfixiara con su propia sangre.

Posterior a eso, confesó que actuó de forma desesperada al no saber que hacer. “Tomé el carro y desesperadamente no sabía para dónde llevarla y pues la llevé por allá a una vereda donde yo trabajaba como médico veterinario. La dejé allá”, relató.


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