Luisa Rodríguez directora de Juventudes de Boyacá se reunió con líderes de todas las provincias para abordar el tema.

Lideresas y líderes de todas las provincias, organizados mediante plataformas y colectivos, participaron en el encuentro poblacional con jóvenes por la Boyacá Grande que se llevó a cabo en el marco de la construcción colectiva del Plan Departamental de Desarrollo 2024 – 2027 ‘Nuestro gran plan es Boyacá’.
Luego de tres mesas de trabajo, los asistentes identificaron retos y apuestas que se convertirán en programas y proyectos. El grupo de participación e incidencia en la vida pública, abordó la importancia de espacios como los gobiernos escolares y juntas comunales.
De igual forma, el grupo dos destacó la equidad y garantía de derechos en salud, deporte, cultura y ambiente como derechos fundamentales para su desarrollo integral.
En cuanto a educación y empleabilidad, este grupo centró su atención en la calidad y la permanencia en las instituciones educativas, así como en la ampliación de ofertas laborales.
Por su parte, Luisa Rodríguez, directora de Juventud de Boyacá, aseguró que la jornada fue clave para identificar que las y los jóvenes coinciden en la necesidad de un campo vital con oportunidades para contrarrestar la migración hacia las ciudades. Éste, precisamente, es un objetivo de la Boyacá Grande.
Frente a los retos, la directora resaltó el reconocimiento de la participación de esta población.
“Tenemos una normativa nacional que nos habla de los Consejos Municipales de Juventud y de unas plataformas locales, que son espacios que permiten que las administraciones tomen realmente decisiones con base en las necesidades de las y los jóvenes. Esperamos poder activar en los 123 municipios, tanto los consejos, como las plataformas y que la participación de la juventud sea efectiva”, comentó, Luisa Rodríguez, directora de Juventudes.
Los consejos empezaron a construirse hace dos años y restan otros dos para que cumplan su primer periodo constitucional.
Según la funcionaria, el anhelo es no quedarse en elegir y posesionar jóvenes, sino en lograr el propósito de la Ley Estatutaria 1622, es decir, que esa participación impacte y transforme comunidades.




