Adriana Magali Matiz hace un comunicado al alcalde de El Espinal Wilson Montaña.
La gobernadora del Tolima, Adriana Matiz, ha sido una de las figuras más visibles en la lucha contra la delincuencia y los grupos armados en el departamento. Su liderazgo ha sido clave en la denuncia de la falta de apoyo del gobierno nacional para enfrentar la violencia, especialmente en las regiones del sur del Tolima. Sin embargo, su lucha también la ha llevado a exigir más compromiso local en la protección de la ciudadanía, especialmente en el municipio de El Espinal, que ha sido objeto de constantes críticas por su creciente inseguridad.
Puntos
En un fuerte llamado, la gobernadora Matiz se dirigió al alcalde de El Espinal, Wilson Gutiérrez, exigiendo dos puntos clave para mejorar la situación de la ciudad. El primero de estos puntos fue la pronta entrega de la escuela Emiliano Lucena, un inmueble que, según la gobernadora, pertenece a la gobernación y que debería ser entregado en buen estado, tal como lo hizo la administración anterior al momento de su entrega.
El segundo punto fue la necesidad urgente de mejorar la seguridad en El Espinal. Según Matiz, el municipio se ha convertido en uno de los lugares más peligrosos del país, a pesar de contar con una considerable cantidad de cámaras de seguridad y un aumento en el pie de fuerza. La gobernadora expresó su frustración al ver cómo los hechos delictivos, incluyendo asesinatos y extorsiones, siguen creciendo, convirtiendo a la ciudad en un destino temido por los visitantes y residentes por igual.
“Ni Ibagué, que es una ciudad mucho más grande, tiene tantos problemas de inseguridad. Lo tenemos controlado, pero El Espinal, con tantos recursos, sigue siendo un lugar con altos índices delictivos”, declaró la gobernadora, según informaron fuentes cercanas a la conversación. La situación de inseguridad ha sido tan grave que incluso se teme un repunte de crímenes sicariales en el municipio.
La situación de inseguridad en El Espinal ha generado inquietud también dentro del equipo de seguridad local. Según una fuente confidencial, la directora de Seguridad y Justicia del Tolima, Lanny Julieth Torres, podría dejar su cargo en marzo de 2025 debido a la falta de apoyo del alcalde Gutiérrez en términos de presupuesto para combatir la delincuencia. Torres, quien ha trabajado intensamente en la lucha contra los delitos, ha expresado en varias ocasiones que, a pesar de los recursos entregados a la fuerza pública, los resultados han sido limitados.
En declaraciones filtradas, Torres reveló que ha sido amenazada en varias ocasiones mientras intentaba implementar medidas de seguridad. «De qué sirve darles llantas, gasolina y todo lo que pidan si no hay resultados contundentes», señaló, reflejando la frustración que se vive en la administración local ante la ineficacia de algunas acciones para reducir los hechos delictivos.




