El alcalde Yider Luna vuelve a estar en el centro del debate político tras la expedición del Decreto 499 del 16 de octubre de 2025, mediante el cual se establece la ley seca en Pitalito desde las 5:00 a.m. del domingo 19 de octubre hasta las 5:00 a.m. del lunes 20, con motivo de las elecciones de Consejos de Juventud.
A diferencia de otros municipios, donde la medida inicia el día anterior, el mandatario laboyano optó por reducir el tiempo de restricción, generando críticas por la aparente falta de coherencia en una jornada que busca garantizar orden y civismo.
El objetivo de la ley seca es prevenir alteraciones al orden público y promover una participación electoral responsable. Sin embargo, para muchos ciudadanos y analistas, la medida en Pitalito resulta ineficaz y contradictoria, pues permite el expendio y consumo de licor hasta la madrugada del propio domingo electoral.
“El mensaje es confuso. No se puede pedir responsabilidad ciudadana mientras se permite el consumo de alcohol tan cerca de los comicios”, señaló un líder juvenil consultado.
Impacto
El segmento llamado a las urnas jóvenes entre 14 y 28 años es el mismo que más participa en la vida nocturna del fin de semana. Por ello, varios sectores advierten que esta decisión improvisada podría afectar la asistencia a las urnas y distorsionar el propósito de la jornada democrática.
En medio de la polémica, el decreto de Luna deja en evidencia una tensión recurrente entre la intención política y la eficacia administrativa, mientras Pitalito se prepara para otro domingo donde las medidas parecen más simbólicas que efectivas.