La Fiscalía General de la Nación, en trabajo coordinado con la Policía Nacional, logró la judicialización de tres personas señaladas de participar en actividades de microtráfico en el municipio de Garzón, Huila. Se trata de Edwar Quinayas Quinayas, Mayda Liliana Quinayas Quinayas y Luisa Fernanda García Rodríguez, quienes fueron capturados durante diligencias de allanamiento en el barrio La Libertad, zona urbana del municipio.
Los operativos, ejecutados en cumplimiento de órdenes judiciales, permitieron además la incautación de siete teléfonos celulares, cuatro computadores portátiles y un DVR, elementos que habrían sido utilizados para coordinar y controlar las operaciones ilícitas de expendio de drogas en el sector.
Imputación de cargos
De acuerdo con la información entregada por la Fiscalía, los tres capturados fueron presentados ante un juez de control de garantías, donde se les imputó el delito de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes. Ninguno de los procesados aceptó los cargos.
El fiscal del caso, adscrito a la Seccional Huila, expuso los elementos materiales probatorios recopilados, entre los que se encuentran informes de vigilancia, testimonios y registros de seguimiento que darían cuenta de la presunta responsabilidad de los detenidos en una red de narcomenudeo que operaba de forma organizada en distintos puntos del área metropolitana de Garzón.
Rutas clandestinas
Según los resultados de la investigación, el grupo habría utilizado casas deshabitadas del sector conocido como La Zanja de Lion, un estrecho callejón en la parte baja del municipio, como centro de acopio y distribución de estupefacientes.
De manera sistemática, los implicados presuntamente ingresaban a estos inmuebles para almacenar dosis de marihuana, bazuco y cocaína, que posteriormente eran distribuidas a consumidores locales. Las autoridades también revelaron que los capturados habrían creado conexiones entre viviendas a través de pasadizos secretos, lo que les permitía desplazarse rápidamente y evitar la detección de los patrullajes policiales.
Esta modalidad de operación, discreta pero eficaz, habría dificultado por meses la labor de los investigadores, quienes finalmente lograron recolectar las pruebas suficientes para sustentar las órdenes de captura.
Medidas de aseguramiento
Durante la audiencia de solicitud de medidas cautelares, el juez encargado del caso determinó imponer medida de aseguramiento intramural en contra de Edwar Quinayas Quinayas, por considerar que representa un riesgo para la comunidad y podría continuar con la actividad delictiva si permanece en libertad.
En cuanto a Mayda Liliana Quinayas Quinayas y Luisa Fernanda García Rodríguez, el juez decidió otorgar la detención domiciliaria, bajo el argumento de que no cuentan con antecedentes judiciales y no se evidencia un riesgo inminente de obstrucción a la justicia.
Finalmente, la Fiscalía informó que el caso sigue abierto y no se descarta que haya más personas vinculadas a esta estructura delictiva. Los investigadores analizan el contenido de los dispositivos electrónicos incautados, así como otras evidencias recolectadas durante los allanamientos, que podrían permitir identificar a posibles cómplices o superiores jerárquicos en la cadena del narcomenudeo.
