Prestar el servicio de atención a la comunidad, es quizá la prueba más grande que tenga una persona en cualquiera de los sitios públicos de una ciudad o municipio, y es así como una funcionaria como doña María Leída, dejó un legado.
Dios, llamó a su lado a doña María Leída Pérez, quien por muchísimos años laboró en el hospital Benjamín Barney Gasca, en el municipio de Florida en el departamento del Valle, y la cual con su amor, respeto, su atención y humanidad, logró ganarse el corazón de la comunidad que a diario asistía a buscar ayuda en este centro asistencial.
“María Leida, deja no solo un legado en nosotros los amigos, en la comunidad, sino en toda la dependencia, porque era una mujer muy respetuosa, amante de su labor, tenía un liderazgo social único, siempre nos mostró su corazón inmenso, y eso llevó a que la quisiéramos y hoy la extrañemos”, argumentó doña Catalina Rincón, amiga de la fallecida.
Son muchas las apersonas que se van al más allá siendo recordadas por sus buenos hechos, tal como sucede con la protagonista de esta triste historia, quien será muy recordada por todos esos allegados que tuvieron el placer de compartir con ella.
