Como Fredy Ronaldo Rodríguez fue identificado el joven de 22 años que perdió la vida tras recibir cinco impactos de bala cundo se encontraba en el polideportivo del barrio Vainilla, en Villavicencio. El hecho ocurrió en un lugar que suele ser punto de encuentro para los vecinos y espacio recreativo para jóvenes y familias.
Hechos
Según el relato de testigos presenciales, Fredy se encontraba sentado en las escaleras del polideportivo, acompañado por un grupo de amigos, cuando sujetos desconocidos se acercaron y abrieron fuego contra él. El estruendo de los disparos provocó el caos en el lugar, obligando a los presentes a correr para resguardarse.
A pesar de que algunas personas intentaron auxiliarlo rápidamente y Fredy fue trasladado de urgencia a un centro asistencial cercano, los médicos no pudieron salvarle la vida. Su muerte fue confirmada minutos después de su ingreso al hospital, debido a la gravedad de las heridas.
Autoridades
Las autoridades iniciaron una investigación para esclarecer los hechos y dar con los responsables del crimen. Hasta el momento no se han efectuado capturas, lo que ha generado incertidumbre e indignación entre los residentes del barrio Vainilla, quienes temen que la violencia siga cobrando vidas en esa zona.
Comunidad
Versiones de vecinos de la zona apuntan a que el asesinato podría estar relacionado con un presunto ajuste de cuentas. “Ese pelado lo conocían en el barrio por ser tremenda valija, ya eso lo tenían más que fichado por ladrón”, expresó un ciudadano de manera anónima.
En redes sociales, vecinos y conocidos de Fredy expresaron su dolor y conmoción por lo ocurrido. “Ay vecino, ojalá Dios te perdone por todo lo malo y te lleve en su santa gloria”, escribió una mujer.
Este hecho ha encendido nuevamente las alarmas sobre la seguridad en Villavicencio, una ciudad que en los últimos años ha sido golpeada por preocupante incremento en los índices de violencia y criminalidad. Los ciudadanos han exigido a las autoridades mayor presencia policial y acciones concretas que devuelvan la tranquilidad a los barrios.
“Debe pasar de un juego de culpas a una rendición de cuentas frentera y sincera sobre lo que se está haciendo en materia de seguridad, no solo sobre lo que sale bien, sino también de lo que está saliendo mal y cómo lo vamos a corregir”, expresó una habitante del sector donde se perpetró el crimen.




