Miller Eduar Artunduaga Ramírez fue atacado por sicarios que lo interceptaron cuando estaba sentado en el andén de la casa.
La violencia volvió a golpear a la capital huilense, cuando un hombre identificado como Miller Eduar Artunduaga Ramírez, de 37 años de edad, fue víctima de un ataque sicarial mientras conversaba con otra persona en un andén en el sur de la ciudad de Neiva.
De acuerdo con versiones preliminares, el hecho se registró hacia las 7:40 de la noche del pasado miércoles, cuando tres sujetos llegaron hasta la carrera 33 con calle 49 y, sin mediar palabra, dispararon en repetidas ocasiones contra la víctima.
Testigos indicaron que Artunduaga Ramírez habría tenido diferencias personales con algunos individuos desde días atrás, lo que podría estar relacionado con este atentado.
Traslado de urgencia
Gravemente herido, el hombre fue trasladado de inmediato al centro de salud de Canaima, donde ingresó en estado crítico. Según el reporte inicial, presentaba una herida por arma de fuego en la cabeza, además de fractura en la muñeca izquierda producto de otro impacto.
Los patrulleros de la Policía que lo llevaron al centro médico señalaron que el paciente llegó inconsciente. Ante la complejidad de las lesiones, los galenos ordenaron su remisión como urgencia vital al Hospital Universitario Hernando Moncaleano Perdomo de Neiva, donde fue conectado a equipos de soporte vital.
Los especialistas advirtieron que había sufrido muerte cerebral, por lo que su cuerpo iba a ser desconectado debido al daño neurológico irreversible causado por la bala.
Investigación en curso
El caso ya está en manos de las autoridades judiciales. La Policía Metropolitana de Neiva adelanta las pesquisas correspondientes para establecer los móviles del ataque y dar con el paradero de los responsables.
El equipo de criminalística está recaudando los testimonios y las grabaciones de las cámaras de seguridad en la zona, con el fin de individualizar y capturar a los victimarios, quienes huyeron con rumbo desconocido tras consumar el hecho.
Aunque por ahora no se descarta ninguna hipótesis, fuentes cercanas a la investigación señalaron que los atacantes podrían estar relacionados con viejos conflictos personales que mantenía la víctima.
Ola de violencia
Este nuevo hecho de sangre aumenta la preocupación de la ciudadanía frente a la ola de inseguridad que atraviesa la ciudad. En lo corrido del año, han sido frecuentes los ataques armados en distintos barrios, lo que ha encendido las alarmas entre las autoridades locales.