Imagen: Bruno Press/ABACA/IMAGO
En el Museo Fénix de Rotterdam, las piezas artísticas narran relatos de migración.
Las emociones principales que acompañan al fenómeno migratorio son valor, esperanza, seguridad, pero también la nostalgia, el temor y el sufrimiento por la separación. En el recién inaugurado museo de arte Fénix, inaugurado en Rotterdam a mediados de mayo, cada una halla espacio y expresión.
Se destaca especialmente una estructura en forma de espiral, que brilla de manera impresionante sobre el tejado. Es una escalera de acero inoxidable que se desplaza por el centro del inmueble en forma de doble hélice torcida, y que, debido a su apariencia, se conoce como «tornado». Un mirador encima el detallado «tornado» en el tejado, brindando una vista impresionante del río Maas y la ciudad de Rotterdam.
