El Ministerio de Salud confirmó que Colombia se acerca cada vez más a la superación del cuarto pico del covid-19 generado por la variante ómicron.
Desde el Puesto de Mando Unificado (PMU), el director de Epidemiología y Demografía del Ministerio de Salud, Julián Fernández, reportó que la disminución de la positividad de personas contagiadas y la dominancia de la variante ómicron
“Todo parece indicar que avanzamos con consistencia hacia la superación del cuarto pico a nivel nacional” comentó el funcionario.
También agregó que en los informes recopilados en el sistema de salud, se halló una tendencia a la disminución del número de casos desde el inicio de síntomas.
“Hemos visto una reducción en el número de casos hasta en los reportes de personas mayores de 60 años u otros grupos priorizados», puntualizó.
Fernández resaltó que a pesar de las cifras presentadas en los últimos días evidencian una disminución de contagios y víctimas, se debe tener prudencia ante la posible aparición de nuevas variantes de la covid-19.
“Con la prudencia que la pandemia nos ha enseñado a tener, todavía no sabemos cuál podría ser el comportamiento de la sub-variante AB2, que es una sub-variante de ómicron, por lo que se tiene una gran incertidumbre”, dijo.
Así las cosas para el experto, la cifra de contagios y covid-19 por la variante ómicron seguirá descendiendo de forma lenta en los próximos días.
“Dado el comportamiento asincrónico que el pico ha tenido en el territorio nacional, es posible que tarde un poco más en caer en algunas regiones, pero podemos afirmar con prudencia que estamos cerca de superar a nivel nacional el cuarto pico”, señaló.
Finalmente, Fernández aseguró que la próxima semana se expedirá un nuevo lineamiento de ruta de articulación, para la gestión de posibles casos de covid-19 en el entorno educativo.El documento está siendo diseñado además por el Instituto Nacional de Salud (INS) y el Ministerio de Educación.
“El documento permitirá contribuir aún más a la presencialidad necesaria del sector educativo; ratificar las funciones de vigilancia epidemiológica y respuesta inmediata que ya existen; articular a los actores del sector educativo y recordarles su responsabilidad de encender alarmas que permitan la respuesta del sector salud”, concluyó.




