Lamine Yamal atraviesa un período irregular en su rendimiento que genera preocupación en el FC Barcelona, a pesar de su brillante actuación ante el Club Brujas en la última jornada de Champions League
El joven talento del Barcelona ha experimentado semanas complicadas donde su nivel no ha sido el mismo que lo catapultó como una de las grandes promesas del fútbol mundial. Aunque contra el Brujas recuperó sensaciones y fue la gran figura del partido con un gol espectacular y la jugada que forzó el empate definitivo, lo cierto es que el español venía arrastrando molestias físicas en el pubis que habían mermado su rendimiento en encuentros previos, impidiéndole mostrar la continuidad y el brillo que lo caracterizaron durante su explosión como estrella emergente del conjunto culé.
La irregularidad de Lamine Yamal refleja también la dependencia excesiva que el Barcelona tiene del joven de 18 años para resolver partidos complicados, situación que genera presión adicional sobre sus hombros en momentos donde el equipo atraviesa dificultades colectivas. El cuerpo técnico del Barcelona trabaja para manejar cuidadosamente las cargas físicas del extremo y recuperar su mejor versión de manera sostenida, conscientes de que el futuro del club está estrechamente ligado al desarrollo y consolidación de una de las joyas más valiosas del fútbol europeo actual.




