La sucursal del cielo tiene ritmo

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Redacción EXTRA
En pleno corazón del barrio Obrero, Cali se prepara para escribir una nueva página en su historia
cultural con la renovación de la Calle de la Salsa. Este emblemático lugar, cuna de grandes
orquestas y punto de encuentro de artistas, costureros, bailarines y melómanos, será escenario de
una gran transformación. La comunidad celebra que esta obra rinda homenaje a los años dorados
del ritmo que identifica a la ciudad ante el mundo. El fotógrafo y promotor cultural Carlos
Chavarro destaca que este proyecto será “una fiesta de estadio”, donde el arte, la memoria y la
identidad caleña brillarán con más fuerza.
Diego Possu, conocido cariñosamente como “Mi Chino Junior”, es uno de los personajes más
queridos de esta historia. Sastre de profesión e hijo de un reconocido modisto que vistió a figuras
legendarias de la salsa, que ha mantenido viva la tradición familiar. En su memoria conserva las
tardes en las que su padre cosía trajes para artistas como Piper Pimienta, quien con su música y
estilo representó la esencia alegre y colorida de la Cali de los años maravillosos. “Desde los diez
años veía pasar por la sastrería artistas que vestían de color, elegancia y ritmo”, recuerda con
orgullo.
Contribuir
El legado de su padre no solo se reflejaba en la tela, sino también en los lazos que tejió con la
historia musical de la ciudad. Entre sus clientes también estuvo el recordado Daniel Santos, una
voz que marcó generaciones y contribuyó a posicionar a Cali como epicentro mundial de la salsa.
Cada prenda elaborada en su taller llevaba consigo un pedazo de arte, de ritmo y de identidad
caleña. Para Diego, la nueva Calle de la Salsa es un reconocimiento a esas manos invisibles que,
con aguja e hilo, ayudaron a vestir los sueños de toda una generación de salseros.
El fotógrafo Carlos Chavarro, reconocido organizador de eventos en el barrio Obrero, asegura que
esta obra revitalizará uno de los sectores más emblemáticos de la ciudad. “Aquí nació la fiesta
popular, el encuentro barrial y la alegría que hoy hace famosa a Cali”, comenta. Chavarro destaca
que el proyecto no solo embellecerá la zona, sino que atraerá turismo cultural, dinamizará el
comercio y reafirmará la identidad del barrio como epicentro de la cultura caleña. La comunidad

espera que este espacio se convierta en un punto de referencia internacional para los amantes de
la salsa.

Oportunidades
Otro protagonista de esta historia es Hernando Varela, reconocido cantante del grupo El Nuevo
Son, quien ha dedicado su vida a mantener viva la herencia musical de la ciudad. Varela considera
que la salsa ha evolucionado con el tiempo, pero conserva su esencia de alegría, resistencia y
comunidad. “Esta nueva obra del barrio Obrero es una oportunidad para mostrarle al mundo que
la salsa sigue viva, transformándose con cada generación”, expresó. Para él, la renovación de la
Calle de la Salsa será un símbolo de unión, arte y orgullo caleño.
La ciudad entera espera con entusiasmo la inauguración de la renovada Calle de la Salsa, una obra
que promete ser vitrina de talento y tradición. En este lugar también se encuentra el Museo de la
Salsa, espacio dedicado a preservar la historia de los grandes exponentes del género. La
comunidad del barrio Obrero se alista para una celebración que promete marcar un antes y un
después en la cultura caleña. Con ritmo, color y memoria, Cali reafirma su título de “Sucursal del
Cielo” y consolida su posición como la capital mundial de la salsa.

foto tomada por Rafael Cataño


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