Tras el comunicado que la Embajada de Rusia publicó de acuerdo a las declaraciones del ministro de Defensa, Diego Molano, sobre el apoyo militar en Venezuela, el presidente Iván Duque llevo a cabo una reunión con el representante de la nación euroasiático en el país, Nikolay K. Tavdumasze, acompañado de la vicepresidenta y canciller Marta Lucía Ramírez.
El mandatario colombiano le exigió a Rusia que garantice que el armamento que suministrada a Venezuela no terminará en manos de los grupos armados que están en la frontera o sean utilizadas «para agredir a un país de la región o afectar la estabilidad de la misma».
Al finalizar el encuentro la vicepresidenta y canciller, Marta Lucía Ramírez, aseguró que el dialogo que sostuvieron fue “muy respetuoso” y que además se “ha entendido la preocupación expresada” por el ministro Molano, en cuanto a la situación de violencia que hay en la frontera por la presencia de grupos ilegales.
Por su parte, el diplomático ruso garantizó que ninguna cooperación militar de Rusia a Venezuela se utilizará jamás en contra de Colombia. También ambas naciones se comprometieron a mantener una comunicación fluida y respetuosa sobre cualquier preocupación que tenga el Gobierno colombiano.
El ministro Diego Molano, aclaró que al usar el “termino injerencia rusa” estaba referida a la pregunta que se le hizo en ese momento y que finalmente lo que “yo afirmé era que había en la frontera grupos armados organizados” y al ser zona fronteriza allí hay movilización de tropas venezolanas que tenían apoyo y asistencia técnica de Rusia.
También expresó su preocupación de que cualquier asistencia o cooperación “no sean utilizados en contra de Colombia”.
Además Ramírez, le pidió al embajador que aplique los protocolos internacionales, conocidos como el “certificado de usuario final”, para que haya la garantía de que ningún equipo se utilice por nadie diferente a las Fuerzas Militares venezolanas.
De igual forma, el embajador señaló que:
“Hemos cubierto algunos temas de preocupación que tuvo el gobierno de Colombia”, comentó que el ministro Molano, les aseguro que sus palabras sobre injerencia en las relaciones de Colombia fueron tergiversadas y que no correspondían a lo que él decía. Concluyó diciendo que la solución es conversar y hacer uso de las vías diplomáticas.
Finalmente, cuando le preguntaron a la canciller, si el incidente estaba superado, ella respondió: “Consideramos que sí” y advirtió: “Consideramos que en esto Colombia permanece atento siempre a evitar que cualquiera de los incidentes que hemos tenido en el pasado, de sobrevuelos en el espacio aéreo colombiano y cosas de ese estilo, se repitan”.




