El exmandatario informó que en mayo la planta fue reactivada con apoyo del contratista. Este asistió al personal de Coservicios en el encendido, a solicitud del agente interventor, asegurando que un ingeniero experto de la Procuraduría verificó su operatividad. Según Pérez, existen siete pruebas contundentes que demuestran que la planta sí está en funcionamiento.
En primer lugar, destacó que la Procuraduría General de la Nación realizó dos visitas a la planta, acompañada por procuradores y un ingeniero de apellido Aparicio, quien revisó minuciosamente su operatividad. Se documentaron videos de estas visitas que muestran claramente la planta en funcionamiento.
Además, mencionó que Corpoboyacá ha realizado cuatro inspecciones. En estas, se tomaron muestras del agua tratada y de las fuentes hídricas cercanas, lo que indica un monitoreo exhaustivo de la calidad del agua en la zona. Las pruebas de laboratorio realizadas sobre estas muestras refuerzan la afirmación del exmandatario.
Pérez también señaló que Coservicios, junto con laboratorios acreditados, realizó cinco análisis de laboratorio del agua tratada. Estos análisis se realizaron en el lugar y los resultados se mantienen en registros que el exalcalde tiene en su poder.
El exmandatario informó que en mayo el contratista reactivó la planta con su apoyo. Este asistió al personal de Coservicios en el encendido, a solicitud del agente interventor. Esta acción refuerza la idea de que la planta está operativa y en uso.
Pérez subrayó que este año Coservicios adquirió insumos necesarios para la planta, planteando la pregunta: “Si no funcionara, ¿por qué realizarían esta compra?”. La inversión en insumos se presenta como un indicativo más de la operatividad de la instalación.
En diciembre, el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía General de la Nación visitó la planta. Dejó un acta de inspección que confirma la presencia de peritos y la existencia de agua tratada.




