Al Instituto de Medicina Legal en Neiva fue llevado el cadáver de Castro Castro, para establecer las causas que ocasionaron su muerte.
La comunidad de Santa María se encuentra de luto tras el fallecimiento de Consuelo Castro Castro, conocida cariñosamente como ‘Consuelito’, una mujer cuya vida fue ejemplo de fortaleza, fe y solidaridad.
La tragedia que, al parecer, sufrió a raíz de una inundación que afectó su vivienda terminó deteriorando su salud hasta llevarla a una cirugía que no resistió. Su partida deja un vacío en el corazón de familiares, vecinos y amigos que hoy la recuerdan como un faro de esperanza en medio de la adversidad.
Una vida marcada por la fe
‘Consuelito’ fue reconocida por todos como una mujer profundamente espiritual. Su devoción a Dios y la Iglesia fue el motor que la sostuvo durante los momentos más difíciles de su vida. En cada paso mantuvo su espíritu alegre y un corazón lleno de amor hacia los demás.
“Consuelito Castro descanse en la paz del Señor. Su vida estuvo marcada por la fe, la resiliencia y la bondad. Enfrentó los desafíos con valentía y nunca dejó de creer en la esperanza”, escribió Edith Beltrán Barragán, amiga cercana, al conocer la noticia de su fallecimiento.
El desastre natural que golpeó su hogar no solo destruyó sus pertenencias, sino que afectó gravemente su salud. Su frágil cuerpo no soportó las consecuencias que le dejó.
A raíz de las complicaciones médicas, Consuelo fue trasladada a la Clínica Belo Horizonte en Neiva, donde permaneció hospitalizada en el cuarto piso. Amigos y conocidos comenzaron entonces una cadena de solidaridad para apoyarla en medio de su difícil situación.
El pasado 7 de agosto Edith Beltrán hizo pública una petición de ayuda: “Hola mi gente bella: Consuelo Castro, que ha pasado por tragedias y le amputaron una de sus piernas, se encuentra en Neiva, Clínica Belo Horizonte. Requiere nuestro apoyo. Gracias”. Ese llamado movilizó a decenas de personas que conocían su historia y reconocían la nobleza de su corazón.
Una cirugía que no resistió
Pese al esfuerzo médico y al acompañamiento espiritual de sus allegados, Consuelo no logró superar las complicaciones derivadas de una operación. Su cuerpo fue conducido el pasado 17 de agosto al Instituto de Medicina Legal en Neiva para ser sometido al análisis forense.
La noticia, que rápidamente se difundió en Santa María, provocó expresiones de tristeza y solidaridad. “Consuelo nunca se rindió. Siempre mantuvo la fe y la esperanza en Dios. Ese es el mayor ejemplo que nos deja”, concluyó Edith Beltrán.




