La especie Naryciodes posticalis pertenece a la familia de polillas Limacodidae, conocidas popularmente como polillas babosa 🐛 debido a la textura gelatinosa de sus larvas.
Sin embargo, esta especie rompe por completo con esa apariencia.
🐌 Una oruga que parece un caracol
Aunque pertenece al grupo de polillas babosa, la larva de Naryciodes posticalis no se asemeja a una babosa, sino que imita perfectamente la forma de un caracol.
Este comportamiento único se observa en Japón, donde la especie es endémica y ha perfeccionado una de las estrategias de defensa más sorprendentes de su entorno.
🛡️ Mimetismo como defensa: así engaña a sus depredadores
✅ Imitación de concha
La oruga desarrolla una joroba central prominente, adornada con anillos concéntricos y patrones coloridos que simulan una concha real.
Este diseño funciona como un mecanismo disuasorio capaz de confundir a los depredadores, que la perciben como un caracol poco apetecible o difícil de atacar.
👀 Falsos ojos que completan el engaño
En su parte posterior, posee dos pequeños apéndices gruesos, muy parecidos a los pedúnculos oculares de un caracol.
Este detalle final refuerza la ilusión al máximo: desde la distancia, resulta difícil distinguir que en realidad se trata de una oruga.
🔍 Un ejemplo extraordinario de mimetismo en la naturaleza
La Naryciodes posticalis demuestra cómo la evolución puede producir formas ingeniosas de camuflaje, capaces de aumentar las probabilidades de supervivencia de una especie.
Su apariencia de caracol no solo engaña, sino que también la convierte en una de las larvas más fascinantes del reino animal.




