En una semana marcada por una creciente crisis climática y preocupación ciudadana, el alcalde de Sogamoso, Mauricio Barón, se apartó temporalmente de su cargo por asuntos personales. En su reemplazo, fue designado como alcalde encargado el actual secretario de Seguridad y Convivencia, Alexander Merchán Cely, una decisión que ha causado inquietud en diferentes sectores de la comunidad.
La elección de Merchán no ha sido bien recibida por todos. Aunque ocupa un cargo estratégico dentro del gabinete municipal, su perfil genera dudas sobre su idoneidad para liderar la ciudad, especialmente en un momento crítico. Su gestión como secretario ha estado marcada por una débil conexión con la comunidad y una limitada capacidad de diálogo con sectores sociales. Líderes barriales han señalado la falta de canales efectivos de comunicación con su dependencia.
A esto se suma que la Secretaría de Seguridad ha sido objeto de múltiples críticas por parte de la opinión pública, debido a un incremento de hechos delictivos en diversos sectores del municipio. Pese a la publicación constante de boletines oficiales que destacan supuestas mejoras en los índices de seguridad, la percepción ciudadana sigue siendo negativa.
Barrios como Luna Park, Magdalena y 20 de Julio han reportado casos recurrentes de hurtos, riñas y consumo de drogas en espacios públicos. Frente a esta realidad, muchos se preguntan si Merchán era realmente la persona adecuada para asumir el mando, aunque sea de forma temporal.
La decisión del alcalde Barón plantea preguntas importantes: ¿Por qué no delegar en alguien con mayor liderazgo social y aceptación? ¿Está el gobierno priorizando intereses burocráticos por encima del bienestar ciudadano?
