Una nueva ley aprobada en Estados Unidos ha generado un gran debate en el país. La ley Laken Riley, nombrada en honor a una joven estudiante de enfermería asesinada por un migrante indocumentado en Georgia, establece que los migrantes irregulares pueden ser arrestados y deportados por delitos menores como hurto o robo.
La ley, impulsada por el Partido Republicano, ha sido criticada por organizaciones de derechos humanos y grupos migrantes, quienes argumentan que viola la presunción de inocencia y contradice los valores constitucionales del país. Sin embargo, sus defensores argumentan que aumentará la seguridad ciudadana y protegerá a los estadounidenses de la delincuencia.
La ley también permite a los estados demandar al gobierno federal si libera a un indocumentado bajo custodia o no aplica ciertas leyes migratorias. Esta medida ha generado un gran revuelo en la comunidad migrante y ha sido objeto de análisis y debate en los medios de comunicación.
El caso de Laken Riley, una joven de 22 años que fue brutalmente asesinada por un migrante indocumentado en febrero de 2024, fue el detonante para la aprobación de esta ley. Sin embargo, la medida ha generado un gran debate sobre la política migratoria de EE. UU. y su impacto en la comunidad migrante.




