Una de las historias que más ha llamado la atención en Miss Universo es la de la candidata de Tailandia, Anna Sueangam-iam, quien no hizo parte de las 16 semifinalistas, se llevó el premio al liderazgo, una distinción que se la ganó por su pasado y su historia de vida.
Según manifestó la nueva dueña del certamen, la modelo es hija de padres que se dedicaban a recolectar basura.
La joven lució un vestido en la etapa preliminar del Miss Universo con un traje hecho de tapas de lata y diamante, el cual tiene un significado especial para ella, pues sería en honor a sus padres.
El vestido de Sueangam-iam fue confeccionado por tapas de lata y se le incrustaron diamantes Swarovski, para generar un estilo brillante.
