La Galería Gato Gordo de Miami, dirigida por el maestro colombiano Óscar Esteban Martínez, inicia una nueva etapa dedicada a visibilizar el talento de artistas emergentes tardíos de Centro y Latinoamérica.
En su programa inaugural, el curador invitado Oskar Romo presenta la incorporación del artista nariñense Franco Ponce con su obra titulada Puente, que marca un diálogo vibrante entre memoria popular y arte universal.
El compromiso de la galería es claro: crear un espacio de intercambio cultural que acerque las voces artísticas latinoamericanas al público norteamericano, promoviendo sus lenguajes y contextos socioculturales.
Franco Ponce, reconocido por su técnica meticulosa y su proceso de apropiación visual, transforma íconos de la infancia como Bugs Bunny, He-Man o Mickey Mouse en protagonistas de una narrativa contemporánea que convive con referencias a Warhol, Basquiat, Dubuffet y Rothko. Su obra, inscrita en el neo-pop latinoamericano, propone un puente entre lo popular y lo académico, entre la nostalgia y la reflexión crítica.
La Galería Gato Gordo consolida su papel como plataforma de diálogo y proyección internacional del arte latino, reafirmando que la memoria colectiva también puede ser una forma poderosa de modernidad.




