Falcao contó cómo vivió esos primeros instantes tras la lesión y que se anticipó para lo peor, sabiendo que nada bueno estaba por venir. «Me acuerdo que esa noche, me traen en avión privado a mi casa y ya hacían llamadas. Yo ya sabia, el doctor me había hecho los test y la rodilla se movía para todos lados. No me lo habían confirmado pero yo dentro mío sabía. Fue un momento de lucha, difícil, preguntaba Dios por qué me había pasado eso. Por suerte había llegado mi primera hija, ya no solo pensaba en fútbol, era más humano», contó en una entrevista con Mario Suárez.
«Fue un palazo durísimo. Dentro de todo cuando me lesiono traté de ser positivo, me decía que iba a matarme, hacer lo posible y después decidir en qué estamos. Creo que José (Pékerman) me llevaba, él tenia fe y espero hasta ultimo momento. Tenía que dar la lista y la noche anterior me llamó para ver qué hacíamos. Le dije que no estaba. Yo no había llorado hasta ese momento, pero cuando ellos se fueron en el bus y yo me fui en el coche con mi amigo, me quebré y no aguanté más», apuntó el colombiano.
