Delincuente escapando con el vehículo hurtado.
La mañana del viernes 13 de diciembre, una joven mujer se convirtió en la más reciente víctima de la ola de inseguridad que afecta a Girardot. La víctima fue abordada por una pareja de delincuentes conocidos como «motoladrones», quienes, tras herirla con un arma blanca en uno de sus brazos, le robaron su vehículo en la carrera 18 del barrio Buenos Aires. Este nuevo episodio de violencia se suma a la creciente preocupación de los girardoteños sobre el aumento de los robos y la inseguridad en la ciudad.
Los habitantes de Girardot han comenzado a alzar su voz, pidiendo medidas más efectivas para frenar esta ola delictiva. En particular, exigen a la Policía y a las autoridades de tránsito la implementación de operativos relámpago en diversos puntos del municipio. Estos operativos serían fundamentales para realizar verificaciones de antecedentes de personas y vehículos, así como requisas detalladas que permitan detectar a tiempo a los delincuentes y evitar que continúen cometiendo delitos con impunidad.
Uno de los factores que se señala como un agravante en la situación de inseguridad es el aumento de los mal llamados «rescates». Tras los robos, los delincuentes no solo se apoderan de los vehículos, sino que extorsionan a los propietarios exigiendo grandes sumas de dinero a cambio de devolver los automóviles robados. Este tipo de extorsión ha crecido de manera alarmante en los últimos meses, lo que ha generado un ambiente de miedo y desconfianza entre los habitantes de la ciudad.
