La vicepresidenta Kamala Harris se enfrenta a una tarea monumental que podría determinar sus posibilidades en las próximas elecciones del 5 de noviembre: reducir la ventaja del expresidente Donald Trump entre los votantes que confían en él para manejar la economía.
Aunque Harris ha avanzado en la percepción de sus capacidades económicas, Trump continúa liderando la mayoría de las encuestas sobre este tema, que es una de las principales preocupaciones de los electores.
La campaña de Harris y sus aliados demócratas consideran que es crucial revertir esta ventaja y, al menos, lograr un empate en la confianza de los votantes.
“Con cuatro semanas por delante, nos enfocaremos en esto y lo discutiremos abiertamente”, comentó un asesor de Harris, que pidió permanecer en el anonimato para hablar sobre la estrategia.




