La Juventus protagonizó un partido vibrante en la Liga de Campeones al igualar 4-4 frente al Borussia Dortmund en un duelo que tuvo emociones de principio a fin. El conjunto italiano mostró carácter para reaccionar en los momentos más complicados y logró rescatar un punto en casa gracias a una ofensiva incansable que se reflejó en los números del encuentro.
Los bianconeri fueron superiores en volumen ofensivo, registrando 18 remates, de los cuales 7 fueron directos al arco, lo que duplicó prácticamente las cifras del Dortmund. Esta insistencia le permitió mantenerse en el partido incluso cuando parecía que la visita se llevaba los tres puntos. La pegada de Vlahović, con un doblete en el tramo final, fue decisiva para sostener esa ambición goleadora.
En cuanto a la posesión, la Juventus dominó ligeramente con un 51% frente al 49% del rival. Este equilibrio demuestra que el partido fue abierto, pero los locales supieron administrar el balón en momentos clave. Además, completaron 450 pases con una precisión del 93%, una muestra de la claridad en la circulación y del esfuerzo colectivo por mantener el control en zonas determinantes.
La disciplina táctica también quedó evidenciada en la estadística de faltas. Mientras la Juventus cometió 14 infracciones, el Dortmund apenas 8, lo que refleja la intensidad defensiva de los italianos al momento de cortar los ataques rivales. A pesar de esa cifra, los de Turín salieron indemnes en el apartado disciplinario: no recibieron ni una sola tarjeta amarilla ni roja.
Otro aspecto interesante fueron las posiciones adelantadas. La Juventus cayó en fuera de lugar en 4 ocasiones, frente a ninguna del Dortmund, lo que indica la constante búsqueda de espacios en ataque. Esa vocación ofensiva también se complementó con los 4 tiros de esquina a favor, contra solo 2 de los alemanes, señal de que los locales presionaron hasta el último minuto.
El aporte individual también fue vital para transformar las estadísticas en goles. Kenan Yıldız abrió el camino con un tanto al 63’, Vlahović marcó por duplicado en el 67’ y 90+4’, y Lloyd Kelly firmó el empate definitivo en el 90+6’. Estos nombres se convirtieron en los reflejos de un equipo que nunca se dio por vencido.
El empate puede dejar sensaciones encontradas, pero los números muestran que la Juventus fue protagonista en casi todos los apartados. Más remates, mayor precisión en los pases y un despliegue ofensivo constante que, aunque no se tradujo en victoria, sí refuerza la idea de que este equipo tiene recursos para competir al máximo nivel en Europa.




