En el primer partido de la era César Farías en el Metropolitano de Barranquilla, Junior perdió 3-4 ante Águilas Doradas y al finalizar el partido los ánimos de los aficionados se desbordaron y en gran parte de las graderías hubo complicaciones, en occidental lanzaron vallas al parqueadero interno, afectando algunos carros de los jugadores.
Según informó El Heraldo, uno de los autos más afectados fue el de Carlos Bacca. Las vallas dañaron el capó y la parte delantera. Los jugadores tuvieron que estar por varias horas en el escenario deportivo. Cuando el capitán vio los daños se mostró disgustado.
El atacante de 38 años de edad tuvo que salir escoltado del Metropolitano de Barranquilla. El equipo estuvo cerca de encontrar el empate sobre el final, donde hubo una acción polémica por una posible mano dentro del área. El entrenador venezolano aseguró que fue un partido “bastante extraño”.
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Desde Barranquilla indican que el jugador de Junior, Didier Moreno tuvo un fuerte cruce con José Luis García, entrenador de Águilas Doradas. Esto sucedió cuando terminó el partido. Uno de los capitanes del equipo barranquillero entró muy molesto por la última acción del partido en donde pidieron penal.
Los encargados de bajar los ánimos fueron César Farías y Carlos Bacca, quienes le pidieron a los jugadores de Águilas Doradas que se fueran al camerino y evitaran una discusión peor. Junior de Barranquilla ahora se prepara para el duelo con Atlético Nacional el próximo jueves 26 de septiembre.
