Cali – Un nuevo capítulo de preocupación sacude al Deportivo Cali luego de que uno de sus futbolistas revelara haber recibido amenazas que comprometen su tranquilidad personal y profesional. La situación encendió las alarmas tanto en el club como entre las autoridades competentes, que ya estarían analizando el caso.
Según trascendió, el jugador denunció que las intimidaciones llegaron a través de mensajes en su teléfono y en redes sociales, lo que genera un ambiente de presión adicional en medio del difícil momento deportivo que atraviesa la institución. Aunque no se han dado a conocer los detalles exactos de las amenazas, la directiva del Cali expresó su rechazo categórico a cualquier acto que atente contra la seguridad de los futbolistas.
El cuerpo técnico también manifestó preocupación, recordando que la prioridad debe ser la estabilidad de los jugadores para rendir dentro del campo, sin factores externos que pongan en riesgo su bienestar.
Las autoridades locales ya estarían en contacto con el futbolista para brindarle apoyo y evaluar medidas de protección. Entre tanto, la hinchada ha mostrado un respaldo mayoritario, pidiendo respeto por la integridad de quienes representan al club.
El caso abre un debate más amplio sobre la violencia y la presión que rodea al fútbol colombiano, donde el límite entre la pasión y la intimidación muchas veces se difumina peligrosamente.
