El estadounidense John Poulos, condenado por el feminicidio de la DJ bogotana Valentina Trespalacios, ha generado una nueva polémica tras su reciente traslado a la Penitenciaría de Alta y Mediana Seguridad de Valledupar, conocida como La Tramacúa. Pese a que su condena ya es firme –42 años y ocho meses de prisión–, su estancia en el penal no ha sido tranquila: según fuentes penitenciarias, su comportamiento ha sido calificado como “inapropiado” e incluso “insoportable”.
Contexto del traslado
Poulos fue trasladado desde la cárcel La Picota, en Bogotá, a La Tramacúa el 15 de noviembre de 2025, junto con otros internos. Según reportes de medios regionales, su llegada se dio en un operativo del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) y ha sido particularmente difícil para la administración del penal.
Actualmente, Poulos no ha sido ubicado todavía en una celda definitiva; permanece en la Unidad de Sanidad del penal, una medida derivada de su comportamiento inicial durante el proceso de adaptación.
Problemas reportados
- Según fuentes del penal, Poulos ha mostrado resistencia a cumplir con procedimientos básicos de recepción, como los de identificación y ubicación dentro de la estructura de la prisión.
- Ha argumentado que no entiende el español y ha exigido comunicarse únicamente en inglés, lo que ha dificultado la coordinación entre él y el personal penitenciario.
- También habría solicitado comunicarse con la Embajada de Estados Unidos en Colombia, alegando desconocimiento de las razones de su traslado y buscando posiblemente un amparo o mejores condiciones.
- Otra denuncia que ha hecho es por condiciones médicas, incluyendo supuestas alergias a insectos, para rechazar su estancia en el penal.
- Por último, desde medios como RTA Noticias se señala que ha protagonizado peleas con guardias y discusiones con otros reclusos, lo que ha llevado a que algunos describan su estancia como “insoportable”.
Antecedentes del crimen
- Poulos fue condenado por el feminicidio agravado de Valentina Trespalacios, ocurrido el 22 de enero de 2023 en Bogotá.
- Según la investigación de la Fiscalía, Poulos golpeó y asfixió a Trespalacios, luego embutió su cuerpo en una maleta azul y la abandonó en un contenedor de basura en la localidad de Fontibón.
- Fue detenido en Panamá cuando intentaba huir hacia Turquía, y posteriormente extraditado a Colombia para responder por los cargos.
- La Procuraduría General de la Nación había pedido una condena ejemplar, dada la gravedad del hecho, y finalmente Poulos fue sentenciado a más de 42 años de prisión.
Implicaciones y reflexión
El caso Poulos-Trespalacios sigue generando atención pública no solo por el crimen en sí sino por las consecuencias posteriores de la gestión penitenciaria. El traslado a un penal de máxima seguridad como La Tramacúa demuestra la gravedad de su condena, pero también pone en evidencia los retos que enfrenta el sistema carcelario en Colombia cuando recibe internos que, además de su perfil criminal, presentan resistencia institucional. La barrera idiomática, las quejas por condiciones, y la negativa a cooperar según los protocolos penitenciarios generan un desgaste operativo y simbólico para el INPEC.
Por otro lado, la familia de Valentina y la opinión pública siguen muy atentos: cada movimiento de Poulos dentro del sistema carcelario es observado con lupa, pues su caso se ha convertido en un símbolo más amplio de los debates sobre violencia de género, feminicidio y justicia en Colombia.
Conclusión
El traslado de John Poulos a La Tramacúa no ha sido un simple cambio de penal: ha despertado una nueva ola de conflictos tras las rejas. Su actitud desafiante y sus argumentos han complicado su ubicación en un establecimiento tan riguroso. Para el sistema carcelario colombiano, el caso representa un reto operacional; para la sociedad, un recordatorio de que las consecuencias del feminicidio no se limitan al momento del crimen, sino que se extienden incluso a los espacios donde se cumple la condena.




