Con tan solo 15 años, Jocsan Arce, oriundo de Yopal, se ha convertido en un ejemplo de perseverancia y determinación. Desde hace año y medio, este joven arquero dejó atrás su hogar para unirse al club Fortaleza CEIF de Bogotá, reconocido por ser una de las canteras más importantes del fútbol colombiano.
Carrera
El camino de Jocsan no ha sido fácil. A los 13 años, tomó la difícil decisión de mudarse al capital acompañado de su abuela, dejando a su familia y amigos para perseguir su sueño de ser futbolista profesional. La adaptación a una ciudad tan grande, con un clima y un ritmo de vida diferentes, representó un desafío, pero Jocsan se ha destacado por su madurez y enfoque.
Disciplina
En Fortaleza, Jocsan entrena hasta seis horas al día, combinando sesiones en cancha y gimnasio, mientras finaliza sus estudios de secundaria. Gracias a este esfuerzo constante, ha logrado mejorar aspectos clave de su juego, como el control del balón con los pies, una habilidad crucial para los arqueros modernos.
“Ha sido un sacrificio, pero todo vale la pena por mi sueño. Mi familia y yo estamos comprometidos con este proceso, y sé que lo lograré”, expresó Jocsan en una entrevista reciente. Inspirado por figuras como Thibaut Courtois, el joven guardameta tiene metas claras: debutar profesionalmente, representar a la selección Colombia y algún día jugar para el Real Madrid, su equipo favorito.
Jocsan ha competido en torneos nacionales e internacionales, como la Copa Metropolitana y la Copa Olaya, ganándose el respeto de sus compañeros y entrenadores. Más allá de su talento, destaca su actitud humilde y su mensaje inspirador: “Nunca hay que rendirse, la constancia y la disciplina son fundamentales para alcanzar los sueños”.
Este joven, que inició su carrera en el club Sehar de Yopal, se perfila como una de las promesas del fútbol colombiano. Con un futuro lleno de posibilidades, Jocsan Arce continúa trabajando incansablemente para hacer realidad el sueño que lo impulsa: convertirse en un gigante del fútbol.
