
Israel declaró que atacará con violencia a Hezbolá, quien se verá obligado a pagar una multa significativa por el ataque en Majdal Shams. La responsabilidad del ataque recae en Hezbolá, según Estados Unidos.
El domingo 28 de julio de 1924, el ministro de Defensa israelí se comprometió a atacar con violencia al enemigo después de un ataque aéreo que fue lanzado desde Líbano y atribuido a Hezbolá, que causó la muerte de 12 personas en la zona anexada de los Altos del Golán.
El ministro Yoav Gallant declaró desde Majdal Shams, la localidad drusa donde un cohete golpeó un campo de fútbol y causó la muerte de 12 jóvenes y 30 heridos, que Israel golpeará «con fuerza al enemigo».
El domingo, Israel Katz, el ministro israelí de Relaciones Exteriores, culpó a Hezbolá del bombardeo y afirmó que el movimiento islamista libanés violó «todas las líneas rojas» al disparar deliberadamente contra civiles.
El sábado, Hezbollah reconoció haber disparado cohetes hacia posiciones militares en los Altos de Golán, pero negó haber sido responsable del ataque contra Majdal Shams, un pueblo de aproximadamente 11.000 habitantes.
El ministerio israelí de Exteriores afirmó que el proyectil que causó la muerte de los niños y niñas era un cohete iraní modelo Falaq con una ojiva de 53 kilogramos, y que Hezbolá es la única organización terrorista que los posee en su arsenal.
El sábado, Benjamin Netanyahu, quien es el primer ministro, advirtió que Hezbolá sufrirá «un gran daño» como resultado del ataque. Insistió en que Israel no permitirá que «este ataque mortal sea ignorado».
Estados Unidos también culpó a Hezbolá del ataque «horrendo» y afirmó que fue el resultado de su cohete lanzado desde una región que ellos controlan.
Durante casi todos los días, desde el 8 de octubre, un día después del ataque del grupo terrorista Hamás en territorio israelí, Hezbolá y el ejército de Israel han estado disparando en la frontera.
Durante la guerra de 1967, Israel tomó posesión de la región estratégica de los Altos del Golán de Siria. En 1981, Israel anexó dos tercios de este territorio, una acción que no fue reconocida por la comunidad internacional, excepto por los Estados Unidos.




