La Policía Metropolitana de Neiva ha realizado un operativo de gran impacto en la carrera 1w con calle 48, comuna uno, que ha resultado en la aprehensión de dos menores de edad, de 16 y 17 años, presuntamente involucrados en un homicidio que ha conmocionado a la comunidad local.
El delito que se les imputa es el asesinato de Carlos Alberto Bonilla Ramírez, un reconocido chef local de 40 años, en hechos ocurridos el pasado 18 de agosto en cercanías al barrio Rojas Trujillo, en la comuna 3 de Neiva, lugar donde residía la víctima.
Involucrados en un homicidio
Gracias a una rápida y eficaz respuesta de las autoridades, ambos implicados fueron capturados en horas de la mañana, luego de que la Seccional de Protección y Servicios Especiales, en coordinación con la Unidad Básica de Investigación Criminal, ejecutara la orden de arresto. La denuncia oportuna por parte de los ciudadanos jugó un papel crucial en la resolución de este caso.
El trabajo de investigación que llevó a la captura de los adolescentes fue exhaustivo. Las autoridades recopilaron una serie de evidencias y testimonios que indicaban la posible implicación de los jóvenes en el homicidio de Bonilla Ramírez.
Las medidas
La investigación reveló que el crimen ocurrió en la madrugada del 18 de agosto, cuando Bonilla Ramírez, después de salir de su trabajo, se dirigía hacia su lugar de residencia. Los detalles del caso, que incluyen las circunstancias del asesinato y la participación de los implicados, aún están bajo investigación para asegurar que se haga justicia de manera adecuada.
Tras su aprehensión, fueron presentados ante un juez especializado en justicia para adolescentes. La decisión del juez fue enviarlos a la Fundación Picacho, un centro especializado en la rehabilitación y condena de menores infractores. Esta medida se tomó para asegurar que los homicidas reciban la atención y el tratamiento adecuados mientras cumplen con la sanción impuesta por la ley.
De resaltar
El Coronel Alexander Castillo Marín, comandante de la Policía Metropolitana de Neiva, destacó la importancia de esta decisión y la eficacia del trabajo policial en la captura de los sospechosos. La Fundación Picacho se encargará de proporcionar a los jovenes un entorno que permita su rehabilitación y reintegración social.
De igual manera, destacó que la denuncia ciudadana fue fundamental para lograr la captura de los menores y para la resolución del caso. Invitó a los habitantes de Neiva a continuar reportando cualquier actividad sospechosa a través de la línea de emergencia 123 o mediante los patrullajes del cuadrante más cercano.
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Pie de foto: Carlos Alberto Bonilla Ramírez, occiso.
