Una grave denuncia tiene en alerta a las autoridades de Bogotá: niños y adolescentes de la comunidad Emberá estarían siendo usados para actividades de microtráfico. El alcalde Carlos Fernando Galán señaló que se evalúa presentar una denuncia formal por presunto reclutamiento de menores. Esta práctica representaría una seria vulneración de derechos.
El hecho se detectó durante intervenciones sociales realizadas en el barrio San Bernardo, especialmente entre el trayecto de La Rioja y San Bernardo. Allí, el programa Ciudad Niñez, de la Secretaría de Integración Social, identificó comportamientos sospechosos. Algunos menores parecían cumplir funciones dentro de redes de distribución de droga.
“El equipo que acompaña a los niños en estas zonas de riesgo notó situaciones preocupantes. Algunos podrían estar transportando droga”, explicó el secretario de Integración Social, Roberto Angulo. La denuncia evidencia la exposición de los menores a entornos delictivos y también alerta sobre el aumento del consumo de drogas entre los jóvenes de la zona.
El Distrito anunció medidas de protección para los menores y sus familias. Además, reforzará el acompañamiento psicosocial y buscará articular esfuerzos con otras entidades para frenar este fenómeno.
El secretario de Seguridad, César Restrepo, también advirtió sobre otro posible delito. Según dijo, algunos líderes de la comunidad Emberá estarían vinculando a menores a la guardia indígena. “Ninguna norma permite que un niño asuma funciones de seguridad ni que porte elementos que puedan llevarlo a una confrontación”, enfatizó.




