Los supuestos predicadores, quienes hacían parte del Centro Misionero Bethesda de Duitama, pretendían quedarse con propiedades de la Iglesia.

Se presume que los religiosos pretendían apropiarse del inmueble que la iglesia había aprobado edificar con las contribuciones de los fieles en Duitama y tras una demanda, juez falló a favor de la comunidad religiosa.
Luis Hernán Cruz Ramírez y Bibiana Vargas, fueron demandados por los delitos de falsedad, estafa y perturbación, entre otros, que se enumeran en el recurso elevado por la comunidad religiosa del Centro Misionero Bethesda con sede en Duitama. Esta edificación se construyó específicamente con los aportes realizados por los feligreses, muchos de ellos entregaron sus pertenencias y hasta sacaron créditos para ayudar a construir la obra que tenía como fin servir de Templo para la evangelización de los creyentes.
La obra inició luego de que la Iglesia empezara su proceso de fe en la ciudad, funcionando en el lugar bajo un contrato de arrendamiento con promesa de compraventa, por a poco, sumando esfuerzos de la congregación se logró comprar el inmueble, en promedio, se reunieron alrededor de 3.000 millones de pesos; sin embargo, la estructura nunca se escrituró a favor de la iglesia, sino a nombre de los pastores quienes afirmaban que por haberse edificado sobre un inmueble con tradición heredable, se debía hacer el proceso como personas naturales, lo que sea atendió acudiendo a la buena fe de los religiosos.
Sin embargo, la comunidad entabló en 2019 el recurso legal contra los pastores, tras evidenciar que, 17 años después, la estructura figuraba a su nombre.
“Esto no representó riesgo mientras los religiosos se encontraban vinculados con la organización, estando subyugados a la dirección de la iglesia, cosa que cambió ese año con la renuncia de los pastores a la orden, situación que nos causó preocupación”, dijo Antonia Salas, afectada.
Recientemente, se ha conocido el fallo del Juzgado Segundo Civil del Circuito Oral de Duitama, que, tras corroborar la intención de los religiosos, ordenó, en primera instancia, la devolución a título del Centro Misionero Bethesda.
