Una grave intoxicación masiva por consumo de licor adulterado ha dejado al menos 11 muertos y 14 personas hospitalizadas en Barranquilla, Colombia, en un lapso de 48 horas. La tragedia se originó en el sector de El Boliche, una zona vulnerable del centro de la ciudad, donde habitantes de calle y vendedores informales consumieron una bebida artesanal conocida como «cococho», elaborada con metanol, una sustancia altamente tóxica.
Causas y contexto
La intoxicación se atribuye al consumo de licor artesanal adulterado con metanol, una sustancia altamente tóxica. La bebida, conocida como «cococho», se vende en botellas plásticas sin etiqueta y a precios bajos, entre 2.000 y 10.000 pesos colombianos (aproximadamente 2,6 a 13 dólares). El primer caso se registró el 23 de septiembre, cuando Nicolás Medrano, supuesto fabricante y distribuidor del licor, ingresó al Hospital General de Barranquilla y falleció una hora después.
Respuesta de las autoridades
Las autoridades locales han instalado un Puesto de Mando Unificado (PMU) para coordinar la respuesta a la emergencia. El PMU está integrado por la Secretaría de Salud, la Oficina de Gestión de Riesgo, la Secretaría de Gobierno, la Secretaría de Control Urbano y Espacio Público, la Secretaría de Gestión Social, la Oficina para la Seguridad y Convivencia, y la Policía Metropolitana.
Además, la Policía Metropolitana ha realizado allanamientos en los barrios Rebolo y Las Nieves, en el suroriente de la ciudad, donde encontraron 284 botellas de licor, en su mayoría vacías, además de estampillas, tapas, dosificadores e incluso recipientes con licor adulterado.
Antecedentes en Colombia
Este caso resalta un problema persistente en Colombia con el consumo de licor adulterado. Entre 2019 y 2024, se incautaron más de 560.000 botellas de licor ilegal en el país, predominando el ñeque (o chirrinchi), aguardiente y ron. Las autoridades han intensificado las operaciones de incautación y campañas educativas para prevenir el consumo de licor adulterado.




