Atacó a una estudiante y fue sometido por los vecinos antes de ser entregado a las autoridades.
En el barrio El Empedrado, la tranquilidad de sus habitantes fue interrumpida cuando un hombre, conocido como ‘El Mono’ , fue retenido por la comunidad tras ser acusado de intentar robar y abusar de una estudiante. Según varios testigos que presenciaron el hecho, el sujeto presuntamente se acercó a la menor, intentó hurtar sus pertenencias y cometió tocamientos indebidos. Esta situación provocó una reacción inmediata y contundente de los vecinos, quienes no dudaron en intervenir para proteger a la adolescente y detener al presunto agresor.
La comunidad manifestó su indignación y rechazo ante estos hechos que afectan la seguridad de los jóvenes y la convivencia pacífica del sector. Varios residentes señalaron que hechos como este no deben quedar impunes y que es necesario fortalecer los mecanismos de vigilancia y control en la zona. La rápida intervención de los ciudadanos fue clave para evitar que el sujeto huyera y para ponerlo a disposición de las autoridades competentes.
Al momento de la llegada de la Policía Nacional, el hombre presentaba lesiones visibles, aparentemente ocasionadas por la comunidad en un acto de justicia por mano propia. Además, la motocicleta que utilizaba para desplazarse fue retenida por los vecinos con la intención de impedir que siguiera cometiendo delitos en la zona. Este rechazo popular refleja la preocupación y el compromiso de la población por mantener la seguridad en el barrio.
Las autoridades trasladaron a ‘El Mono’ a un centro de custodia para responder ante la Fiscalía General de la Nación por los cargos relacionados con el intento de hurto y la agresión sexual en grado de tentativa. La Fiscalía ya inició las investigaciones para esclarecer todos los detalles y determinar las responsabilidades legales correspondientes. Se espera que el proceso judicial avance para brindar justicia a la víctima y enviar un mensaje claro contra este tipo de conductas.
Este caso ha generado gran preocupación en la comunidad educativa y entre los padres de familia, quienes exigen mayores garantías para la protección de sus hijos. Instituciones locales y organismos de seguridad trabajan conjuntamente para implementar medidas preventivas y estrategias que permitan evitar que hechos similares vuelvan a suceder.
Por su parte, la Policía Nacional reiteró su compromiso con la seguridad ciudadana y la atención oportuna a las denuncias. Invitaron a la comunidad a mantener la comunicación constante con las autoridades y a denunciar cualquier acto que ponga en riesgo la integridad de los ciudadanos, especialmente de los menores de edad.




