La delincuencia no da tregua en Bogotá, y esta vez el foco está en la localidad de Antonio Nariño, donde vecinos del barrio San Jorge denuncian un preocupante incremento de robos cometidos por delincuentes en motocicleta. Los hurtos ocurren a plena luz del día, sin que haya una respuesta efectiva de las autoridades locales.
“Aquí ya no se puede ni salir tranquilo”: denuncian los vecinos
Los residentes aseguran que los criminales se movilizan en parejas, marcan a sus víctimas y luego actúan con rapidez, muchas veces armados. Don Carlos, habitante del sector, relató con impotencia: “Aquí ya no se puede ni salir tranquilo, los ladrones pasan como si nada y nadie hace nada”. Su testimonio refleja el sentir general de una comunidad que se siente abandonada.
Los vecinos advierten que la presencia policial es escasa, y cuando se reportan los hechos, muchas veces las patrullas no llegan o lo hacen demasiado tarde. A pesar de múltiples llamados a la Línea 123, los ciudadanos aseguran que no ha habido un refuerzo de seguridad en el barrio.
Exigen intervención urgente de la Policía
La comunidad pide una intervención inmediata de la Secretaría de Seguridad y la Policía Metropolitana de Bogotá, con patrullajes constantes, controles a motociclistas y presencia activa en horas pico. También exigen que se activen cámaras de vigilancia y que se priorice la zona en los consejos locales de seguridad.
El caso del barrio San Jorge no es aislado. La modalidad de atracos desde motos se ha convertido en uno de los principales retos en varias localidades de la ciudad. Sin acciones contundentes, los vecinos temen que la situación empeore.
