En una apuesta por ampliar el acceso a la detección temprana del VIH, Bogotá puso en funcionamiento la primera máquina dispensadora automática de pruebas rápidas. Ubicada en un punto estratégico de alto flujo peatonal, esta herramienta permite a cualquier persona acceder, de forma gratuita y confidencial, a un kit de autodiagnóstico. La iniciativa, liderada por la Secretaría de Salud, busca eliminar las barreras de estigmatización y promover el cuidado autónomo, especialmente entre poblaciones jóvenes y vulnerables.
Este modelo innovador de salud pública ha sido bien recibido por organizaciones sociales y expertos en epidemiología, quienes destacan su potencial para mejorar las cifras de detección oportuna en la capital. Además de facilitar el acceso, la máquina cuenta con un sistema informativo que orienta a los usuarios sobre cómo usar el kit y qué hacer en caso de un resultado positivo. La estrategia se contempla como piloto para extenderse a otras zonas de Bogotá e incluso replicarse en otras ciudades del país, como parte de un esfuerzo integral por reducir la transmisión del virus.
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