Un reciente informe nacional encendió las alarmas sobre el estado de la educación en Colombia, al revelar graves deficiencias en la calidad del aprendizaje, la infraestructura escolar y la formación docente. El documento señala que, pese a los esfuerzos de cobertura, el sistema educativo enfrenta una crisis estructural que afecta directamente el desarrollo de los estudiantes.
Según los resultados, gran parte de los alumnos en primaria y secundaria presentan bajos niveles de comprensión lectora y habilidades matemáticas. Además, la brecha entre instituciones públicas y privadas sigue ampliándose, especialmente en las zonas rurales, donde el acceso a recursos tecnológicos y pedagógicos es limitado.
El estudio también advierte sobre la falta de capacitación continua para los maestros y la insuficiencia de programas que garanticen la permanencia escolar, factores que contribuyen al rezago académico.
Expertos y organizaciones del sector educativo han pedido al Gobierno priorizar la inversión en infraestructura, conectividad y formación docente, con el fin de fortalecer la calidad del sistema y asegurar una educación más equitativa y competitiva para las nuevas generaciones.




