La Fiscalía Penal Militar y la Procuraduría General de la Nación han abierto investigaciones por la presunta infiltración de una red ilícita en el anillo de seguridad del presidente Gustavo Petro. La red estaría compuesta por dos militares activos y una civil que se habría hecho pasar por capitana de la Policía Nacional. Según las autoridades, los implicados accedieron a reuniones de inteligencia y obtuvieron información sensible sobre operativos contra grupos criminales, incluyendo el Tren de Aragua.
El ministro de Defensa, Pedro Sánchez, ha minimizado el impacto de la infiltración, asegurando que los detenidos solo conocían información general sobre el perímetro de tránsito del presidente y no detalles específicos sobre su seguridad personal.
La Procuraduría ha iniciado una indagación disciplinaria contra los militares involucrados por presunta extralimitación de funciones y filtración de información, mientras que la Fiscalía Penal Militar y Policial investiga posibles delitos como suplantación de investidura, revelación de secretos y concierto para delinquir.
Este caso ha generado preocupación sobre posibles infiltraciones en la Fuerza Pública y ha llevado a las autoridades a reforzar las medidas de seguridad y control interno.




