Fuerte controversia se desató entre los habitantes de varios conjuntos residenciales del sector norte de Popayán este pasado 19 de Noviembre tras la instalación de corrales y estructuras para la feria equina dentro del complejo deportivo municipal, un espacio destinado exclusivamente para prácticas atléticas y recreación comunitaria. El montaje, realizado en los últimos días, ha dejado al descubierto improvisación, falta de planificación y presuntos riesgos ambientales y de salubridad.

Vecinos denunciaron que el sitio no cuenta con las condiciones mínimas para alojar animales, lo que podría generar acumulación de desechos, olores fuertes, afectación de zonas verdes y posibles contaminaciones. Además, cuestionan que el complejo deportivo construido con recursos públicos para promover actividad física esté siendo utilizado para eventos que no corresponden a su función.
La molestia aumenta porque, según los residentes, la Secretaría del Deporte no socializó la decisión ni evaluó los impactos sobre la comunidad. Las críticas apuntan directamente al secretario de Deporte, Mauricio Martínez, a quien señalan de permitir el uso del escenario de manera arbitraria y sin criterios técnicos claros.
“Esto no es un potrero ni una gallera. Es un complejo deportivo y debe respetarse”, afirmaron varios ciudadanos, quienes aseguran que acudirán a los entes de control si la administración no corrige la situación.
La comunidad exige que Martínez explique quién autorizó el montaje, bajo qué normatividad y por qué se ignoraron los riesgos advertidos. Mientras tanto, el inconformismo crece, y el episodio se convierte en un nuevo foco de cuestionamientos sobre el manejo de escenarios públicos en Popayán.



