La capital colombiana se encuentra conmocionada por el crimen de Harold Andrés García Aroca, un joven de 16 años secuestrado y asesinado en la localidad de Santa Fe. Su cuerpo, con signos de violencia, fue hallado el domingo 10 de agosto tras varios días de búsqueda.
El hecho, que ha despertado indignación ciudadana, comenzó el martes 5 de agosto, cuando Harold fue interceptado por cinco personas, una de ellas armada, mientras jugaba en una cancha de microfútbol del barrio Los Laches. Un video que circula en redes sociales mostraría el momento en que el menor fue obligado a irse con los captores.
Durante su desaparición, la familia recibió mensajes y llamadas desde el teléfono del joven, lo que llevó a las autoridades a triangular su ubicación. Sin embargo, los operativos en zonas controladas por bandas criminales no dieron resultados inmediatos. La madre denunció que la respuesta oficial fue lenta y que incluso recibió advertencias de no confiar en algunos policías del sector.
El alcalde Carlos Fernando Galán lamentó la muerte y aseguró que desde el primer momento se activaron unidades del Gaula, Sijin y Sipol para buscar al menor. “Cada muerte violenta de un menor es un fracaso de todos como sociedad”, afirmó, pidiendo celeridad en la investigación.
La Policía señaló que una de las hipótesis es que el crimen estaría relacionado con una retaliación entre estructuras dedicadas al narcotráfico. No obstante, la madre negó cualquier vínculo de su hijo con actividades ilegales y aseguró que podría haber sido atacado por conocer información sobre otro homicidio.
Concejales como Heidy Sánchez y Ana Teresa Bernal exigieron a la Fiscalía y la Policía una investigación rápida y transparente, denunciando que las autoridades le fallaron a la familia. “No podemos permitir que otro joven sea arrebatado a su familia sin verdad ni justicia”, expresó Bernal.
El caso sigue bajo investigación, mientras la comunidad de Los Laches y organizaciones de derechos humanos reclaman justicia por Harold.




