Indignación en El Cerrito por agente de tránsito que opera con pasamontañas

[responsivevoice_button voice="Spanish Latin American Male" buttontext="Escuchar Noticia"]
Compartir en

Una ola de indignación y preocupación ha surgido en el municipio de El Cerrito, Valle del Cauca, tras la circulación de denuncias ciudadanas que señalan la actuación irregular de un agente de tránsito local, quien al parecer estaría prestando su servicio con el rostro cubierto por un pasamontañas.

De acuerdo con los testimonios de varios habitantes, el funcionario —identificado como el agente número 16— fue visto en días recientes cumpliendo funciones de control vial en diferentes sectores del municipio, sin portar identificación visible y ocultando su rostro, una situación que contraviene los principios de legalidad, transparencia y confianza que deben regir la actuación de los servidores públicos.

Las imágenes y videos compartidos por la comunidad muestran al presunto agente de tránsito interactuando con conductores, imponiendo comparendos y realizando detenciones sin exhibir su rostro ni identificarse plenamente, lo cual ha encendido las alarmas entre la población por los posibles riesgos de abuso de autoridad o suplantación.

La preocupación ciudadana no es menor. Diversas voces en redes sociales han cuestionado si el funcionario en cuestión cuenta con la debida autorización de la Secretaría de Tránsito o si se trata de una persona que, bajo apariencia de autoridad, estaría cometiendo irregularidades aprovechándose del miedo o desconocimiento de la ciudadanía.

“El uso de pasamontañas en procedimientos civiles es inaceptable. Esto genera desconfianza y abre la puerta a posibles atropellos. Uno no puede permitir que lo detenga alguien que no se identifica”, expresó uno de los habitantes del municipio a través de una denuncia anónima.

Expertos en derecho administrativo han recordado que los servidores públicos deben portar su identificación de manera visible durante el ejercicio de sus funciones, y que cualquier actuación sin esta condición podría ser objeto de nulidad o sanción disciplinaria.

Además, se ha advertido a los ciudadanos que no están obligados a acatar órdenes ni a entregar documentación a funcionarios que no estén plenamente identificados, y se les ha invitado a documentar este tipo de casos mediante fotos y videos para hacer llegar las quejas ante los órganos de control competentes.

Hasta el momento, ni la Secretaría de Tránsito de El Cerrito ni la Alcaldía Municipal han emitido un pronunciamiento oficial sobre lo ocurrido, pese a que el tema ha generado amplio debate en redes sociales y en los espacios de opinión comunitaria.

Líderes sociales y defensores de derechos ciudadanos han solicitado que se investigue con celeridad la identidad del funcionario señalado y se esclarezca si cuenta con el respaldo institucional para actuar de esa manera. También han pedido garantías para la transparencia y el respeto a los protocolos establecidos.

“No se puede permitir que un agente de tránsito actúe como si fuera un encapuchado. Su rol es garantizar orden y seguridad vial, no sembrar miedo ni actuar al margen de los principios de la función pública”, comentó una lideresa comunal del barrio Santa Bárbara.

El caso ha puesto sobre la mesa la necesidad de revisar los procedimientos de la Secretaría de Tránsito municipal, así como los mecanismos de control interno que deben garantizar que todos sus funcionarios estén debidamente uniformados, identificados y capacitados para actuar dentro del marco de la ley.

El debate también ha reavivado la discusión sobre el uso de uniformes similares por personas no autorizadas y la posibilidad de suplantación de autoridad, un delito que en otras regiones del país ha servido como estrategia para cometer extorsiones o robos.

Organizaciones ciudadanas ya anunciaron que llevarán el caso ante la Personería Municipal y la Procuraduría Regional, para que se evalúe si hay mérito para abrir una investigación disciplinaria en contra del agente número 16.

Por ahora, la comunidad se mantiene vigilante y a la espera de que las autoridades se pronuncien de manera clara y contundente sobre este hecho, que ha puesto en entredicho la imagen de quienes deben velar por el cumplimiento de las normas viales en El Cerrito.


Compartir en