Informes recientes señalan un preocupante aumento en la actividad de grupos armados ilegales en diversas zonas del departamento del Huila. Esta expansión ha generado alarma entre las comunidades locales y las autoridades, quienes buscan implementar estrategias efectivas para contrarrestar la influencia de estos actores armados.
La Defensoría del Pueblo ha emitido alertas tempranas sobre la situación, destacando que más del 70% del territorio nacional enfrenta la presencia o dominio de grupos armados ilegales, lo que ha derivado en una crisis humanitaria. En el Huila, municipios como Neiva, Tello y Baraya han sido particularmente afectados, con denuncias de vulneración de derechos y restricciones a la movilidad en áreas rurales. 
Ante este panorama, las autoridades locales han reforzado la seguridad en la región. Se ha incrementado la presencia policial y de comandos especiales en zonas críticas, con el objetivo de frenar el avance de estos grupos y garantizar la seguridad de la población. No obstante, la comunidad sigue demandando soluciones integrales que aborden las causas subyacentes de la violencia y promuevan el desarrollo social y económico del departamento.




